Las Fiestas de Pozuelo fueron siempre un momento entrañable de encuentro entre las gentes de Pozuelo.
Han sido siempre unos días dedicados a la alegría, al buen comer y al disfrute de amigos, vecinos y familiares.
Siguiendo este espíritu de mantener viva la tradición y la memoria de nuestros padres, la Asociación Cultural LA POZA participa activamente en diversos actos a lo largo de la semana grande de Pozuelo.
Este año volvimos a contribuir al lucimiento de los actos religiosos, haciendo la tradicional ofrenda a la Virgen de la Consolación durante la Salve del Sábado y asistiendo una representación de nuestra asociación a la Misa Mayor del Domingo.
Ya el lunes, recuperamos de la memoria, la estampa lucida y colorista de los mantones de nuestras abuelas, paseando por las calles festivas de nuestro Pozuelo los bordados multicolores. A las 6 de la tarde, en los jardincillos de la calle Luís Béjar, un revuelo de gentes vestidas con este complemento festivo por excelencia, dio la nota de color y de alegría, mientras se esperaba la llegada de la Peña más veterana de Pozuelo, la peña de Los Mingas. Ya todos juntos, bajamos alegremente hacia la plaza de toros para asistir a la tradicional corrida de toros.
Por la noche, ya concluida la corrida, fuimos a bailar a la Plaza de la Coronación que desde tiempo inmemorial fue el centro neurálgico de la vida cotidiana de nuestro pueblo, celebrándose allí todos los sábados el afamado mercado de Pozuelo y por supuesto, siendo esta plaza, el escenario de las fiestas del pueblo hasta bien entrados los años 80. Allí, al ritmo de la música recordamos con nostalgia infinita aquellas fiestas de antaño, deseando que el baile popular tradicional en este lugar, no se deje languidecer y desaparecer.
No dejamos pasar por alto tampoco, el momento del reencuentro en torno a la mesa y para dar clausura a los actos festivos del 2008, nos reunimos para cenar en un restaurante de Pozuelo, deseando que los 365 días que nos separan de las siguientes fiestas patronales, transcurran lo más rápido posible.
María Jesús Ruiz Rodríguez. Asociación Cultural LA POZA