El pasado 23 de Enero, cientos de personas volvieron a sacar sus mantas y sus peleles para celebrar el tradicional manteo que desde tiempo inmemorial
Pozuelo celebra estos últimos días de enero la más antigua de sus fiestas populares: el manteo del pelele.
Esta fiesta que el genial Goya representó en un célebre tapiz, y que tiene un origen muy remoto, reúne cada año a niños y grandes desde hace más de una década gracias al compromiso de los socios de la Asociación Cultural La Poza que recorren de forma altruista en las semanas previas a la festividad los colegios de la localidad para enseñar y animar a los chavales a elaborar su propio pelele, un muñegote realizado a base de ropas viejas y decorado con mucha imaginación por los pequeños artistas.
Se intenta así que los chicos conozcan las tradiciones y la cultura del viejo Pozuelo y valoren este patrimonio, herencia de sus antepasados, favoreciendo igualmente la comunicación intergeneracional.
Decenas de niños participan así con sus peleles en este juego carnavalesco que tiene lugar en la plaza de la Coronación, mientras suenan las viejas canciones interpretadas en esta ocasión por una agrupación de músicos y por el grupo folk A ballare. Este grupo vocal reunió este año a miembros de esta asociación para aprender las diferentes coplillas que tradicionalmente se cantaban y así poder difundir mejor el patrimonio musical de Pozuelo.
Tras el divertido manteo, los hermanos de San Sebastián realizaron también la tradicional tirada de caridades y naranjas en honor al santo San Sebastián, advocación que se celebra en esta localidad desde antes del siglo XVI. Posteriormente el Ayuntamiento de Pozuelo invitó a los vecinos al chocolate con caridades haciendo las delicias de grandes y pequeños y poniendo la guinda a un festejo que cada año goza de mayor arraigo entre los pozueleros.
